Una vez más vemos cómo la vida da muchas vueltas.
Advertencia: esta nota incluye spoilers del manga y anime de Shingeki no Kyojin, creado por Hajime Isayama.
La historia de Shingeki no Kyojin —conocido de este lado del mundo como Attack on Titan— comienza mostrándonos a un grupo de personas que viven encerrados en murallas, luego de que el mundo fue destruido por unos seres gigantescos que comen humanos llamados titanes.
Eren Jaeger, el protagonista, es testigo del cruel asesinato de su madre y jura vengarse de ello, por lo que toma el objetivo de acabar con todos los titanes; pero su plan de venganza lo ha convertido más en un villano, que en el héroe de la historia. El más reciente arco del manga de Hajime Isayama —que será lo que abarque la temporada 4 del anime— muestra la caída del joven soldado y explica cómo fue que su corazón pasó de querer salvar a la humanidad a desearlos muertos a todos.
Los últimos episodios del manga nos han mostrado la destrucción del planeta a causa de la decisión de Eren de liberar a los millones de titanes colosales que conformaban las murallas de la Isla de Paradis. Específicamente, el #130 y el #131 presentaron a la gente horrorizada al ver a estos seres gigantescos marchando hacia ellos y vimos a muchos ser aplastados hasta la muerte. Pero, ¿fue esto sólo un arranque de Eren? Lo peor es que no, fue una decisión meditada desde mucho antes de que ocurriera.
Al estilo de Daenerys quemando todo, Eren pudo haberse enfurecido por el odio a su medio hermano, que intentó usarlo para eliminar para siempre a los eldianos; o también por haber sido decapitado por uno de los suyos y si a esto le sumas el sufrimiento de Ymir, que ha estado cocinándose por 2 mil años, resulta en la receta ideal para una explosión irracional. Pero esta decisión de barrer el mundo nació mucho antes.
En el episodio #130, “El Amanecer de la Humanidad”, una serie de flashbacks de conversaciones entre Eren e Historia Reiss y Floch Forster, sus más leales aliados, revelan que él nunca tomó en cuenta el plan de Zeke, llamado “Eutanasia”. Al contrario, él también planeaba usar a su hermano para acceder a la Coordenada y activar el Retumbar de la Tierra.
Incluso vemos el momento en que todo comenzó y luce más escalofriante que nunca. Eren juró “destruirlos a todos” cuando vio su hogar en Shinganshina destruido por los titanes. Ahora sabemos que ese “a todos” era literal, titanes, humanos; a quienes llama “animales”. Después Isayama le añade un toque más de crueldad al combinar esta escena con la de los titanes colosales llegando a Liberio, ciudad marleyana de la costa, donde Eren hizo su desastre a comienzos del arco.
Esto revela que Eren no planea proteger a todos los “eldianos”, sino sólo a los habitantes de la Isla, ya que el guetto de sus compatriotas ubicado en Liberio, también es barrido. Esta resolución queda clarísima en las palabras que el protagonista le dirige a todos los eldianos a través de los “caminos invisibles”. El joven jura defender a “la gente de la Isla de Paradis”, no a todos los eldianos.
“Mi nombre es Eren Jaeger. Estoy usando el poder del Titán Fundador para hablar con toda la Gente de Ymir. El endurecimiento de los muros de Paradis se ha deshecho y los titanes del interior comenzaron a marchar. Mi objetivo es proteger a la gente de la Isla Paradis, donde nací y crecí. Sin embargo, el mundo desea aniquilar a la gente de aquí. El odio que creció por tanto tiempo no se terminará hasta que no solo los de la Isla Paradis, sino toda la gente de Ymir sean eliminados. ¡Rechazo tal deseo!”, declaró.
En tanto, los amigos y antiguos enemigos de Eren se unieron para tratar de detenerlo, pero ninguno de ellos se ha resuelto a asesinarlo, ni siquiera Mikasa, a quien Annie le preguntó directamente si sería capaz de hacerlo. Al contrario de esta guerrera, que fue obligada a dejar morir a su padre para intentar salvar al resto del mundo, el protagonista eligió salvar a un grupo pequeño de personas, todos cercanos a él, a cambio de la vida de millones de personas.
Sus acciones extremas no vienen de una persona que se quebró después de años luchando por sobrevivir, al contrario, Eren ha tenido mucho tiempo para pensar en lo que iba a hacer y sufrir por ello, como se vio en el capítulo 131 del manga, donde se pregunta si debe salvar o no a un niño de la muerte, cuando de todos modos morirá por su culpa en el futuro.
El protagonista está sufriendo, pero no por ello su determinación ha menguado, al contrario, no parece que vaya a detenerse por sí mismo y llevará su plan al límite. Aquel niño que vimos en los primeros capítulos como la salvación de la humanidad, terminó siendo el villano más grande de todos.
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