Microsoft ya ha puesto a la venta los nuevos modelos de Xbox Series: Xbox Series S Robot White de 1 TB (349,99 euros), Xbox Series X Digital Edition Robot White de 1 TB (499,99 euros) y Xbox Series X Galaxy Black Special Edition de 2 TB (649 euros). Todas estas opciones se han promocionado durante el Games Showcase 2024 destacando especialmente sus colores y su capacidad de almacenamiento. Sin embargo, ahora se descubre que hay pequeñas modificaciones internas que diferencian las nuevas Xbox Series X de la consola original de 2020.
Ha sido el creador de contenidos Austin Evans, conocido por indagar en las entrañas de los dispositivos tecnológicos, quien se ha percatado de los cambios introducidos por Microsoft. A lo largo de su vídeo de YouTube, el profesional va desmontando la Xbox Series X de 2020 y las nuevas Xbox Series X de 2024 (tanto la Digital Edition como la Galaxy Black Special Edition) para descubrir alteraciones en el interior de las consolas.
Por un lado, se destaca primeramente la decisión de Microsoft de mejorar la refrigeración de la consola prescindiendo de la cámara de vapor ya vista en la Xbox Series X de 2020 para optar por un diseño más tradicional con tubos de cobre en las Xbox Series X de 2024. «Técnicamente, esta es una solución mejor de refrigeración. Pero es más cara», comenta Evans en su vídeo. Por otro lado, los de Redmond también han rediseñado sustancialmente la placa madre original para retirar una protección que solía estar encima del SSD, lo que se complementa con un nuevo espacio donde generalmente se encuentra la unidad de disco. Echando un vistazo en general, el creador de contenidos concluye en que parte de los componentes de la motherboard «se han simplificado, reducido, cambiado o movido».
Las nuevas Xbox Series X consumen menos energía
Lo más interesante del vídeo de YouTube está en la implementación de un chip (SoC) de 6nm en los nuevos modelos de Xbox Series X; «esto significa que la nueva Series X es más barata de fabricar«, añade Evans. De hecho, este cambio se observa especialmente en las pruebas de consumo de energía: la Xbox Series X de 2020 usa 61 vatios cuando no se ejecuta ningún juego, la Special Edition de 2024 usa 51 vatios y la Digital Edition de 2024 baja hasta los 38 vatios. Con un juego en funcionamiento (Forza Horizon 5), estos valores cambian de la siguiente manera: la Xbox Series de 2020 usa 167 vatios de media, la Digital Edition de 2024 usa 156 vatios y la Special Edition unos 151 vatios. Lo que, en resumidas cuentas, supone una reducción de 11-16 vatios para conseguir el mismo rendimiento.
«Esencialmente, lo que tienes aquí es menos consumo de energía (lo que significa una factura de luz ligeramente más baja), pero, más importante, no hay desventajas por ese consumo menor de energía», comenta Evans en su vídeo. En resumen, «significa que [Microsoft] ha podido ahorrar algo de dinero no sólo teniendo un chip más pequeño, sino que también les permite desechar la cámara de vapor más cara para apostar por un disipador de valor más tradicional con tubos de cobre».
Microsoft no ha compartido ningún detalle sobre los cambios internos en sus nuevas Xbox Series X más allá de las diferencias en lo que respecta al color y al almacenamiento. Sin embargo, es común que las fabricantes revisen sus consolas para ofrecer un producto más pulido; algo que se observa con el lanzamiento de modelos posteriores. En esta ocasión, al menos, sabemos que los de Redmond han logrado mantener la misma experiencia de juego en cuanto a rendimiento con una configuración ligeramente más barata y un consumo menor de energía.
–
La noticia
Xbox lo guardaba en secreto, pero los nuevos modelos de Xbox Series X son diferentes a la consola original. Microsoft ha cambiado ligeramente su interior
fue publicada originalmente en
3DJuegos
por
Brenda Giacconi
.
Deja un comentario