Una de las principales virtudes del mundo del PC Gaming es la posibilidad de actualizar tu equipo comprando componentes. A diferencia de las consolas y su ecosistema cerrado, la variedad de tarjetas gráficas, procesadores, memorias y todo tipo de componentes provocan que, a la larga, la opción idónea sea actualizar tu PC Gaming para alargar su vida útil. Sin embargo, la historia del usuario de hoy hace hincapié en la parte negativa de esta situación, ya que lleva más de 100 horas instalando un parche y no quiere apagar su PC bajo ningún concepto.
Como señala Mein-MMO, el jugador intentó actualizar su BIOS para sacar partido a las mejoras en la estabilidad, ya que su versión es de 2018. Para su desgracia, ahora se arrepiente de su acción, dado que la misma le ha llevado a esperar más de 100 horas para una actualización que no llega. En esencia, la BIOS es fundamental para que el hardware del PC funcione de forma correcta. Sin él, el sistema no arranca y, por ello, si el PC se apaga durante la instalación de la BIOS, el resultado es el peor posible: se convierte en un ladrillo imposible de utilizar.
El proceso de recuperación es costoso
Si el ordenador llega a este estado, los componentes no pueden comunicarse entre sí y, como consecuencia directa, el sistema no arrancará. Así, existen varias formas para intentar repararlo, como utilizar el modo de recuperación de la BIOS o utilizar un destornillador si se trata de un equipo antiguo, pero en la mayoría de las ocasiones lo más oportuno es acudir a un taller especializado. Y, como era de esperar, utilizar un dispositivo externo para llevar a cabo esta maniobra no solo es complicado, sino que también es costoso.
En los últimos años, algunos sistemas han optado por sacar partido a una segunda BIOS, ya que esta puede ser útil en casos como el de la historia de hoy. No obstante, el protagonista de la misma sigue esperando a que su ordenador se actualice y, por desgracia, los dispositivos externos ya han empezado a fallar, dado que el monitor de su PC ha perdido la señal. Por norma general, el proceso de actualización de la BIOS solo suele tardar unos minutos, pero en casos como este es evidente que ha habido algún fallo que, por el momento, no consigue solucionar.
Imagen principal de Rafael Pol (Unsplash)
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La noticia
Un gamer relata cómo una actualización de minutos se convirtió en un fallo en cadena de más de 100 horas que acabó con su PC Gaming
fue publicada originalmente en
3DJuegos
por
Abelardo González
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