Tal vez no sea una de las películas más recordadas de Sylvester Stallone, pero Máximo Riesgo (Cliffhanger) es, sin duda, uno de sus trabajos más emocionantes. Estrenada en 1993, esta película de acción se inscribe en la tradición del cine de los 90, una década que aún arrastraba ciertas secuelas del cine ochentero: héroes musculosos, villanos de manual y escenas de acción trepidantes, muchas veces al borde de lo ridículo. Sin embargo, Máximo Riesgo tenía motivos suficientes para pasar a la historia, ya fuera por una de sus acrobacias aéreas, la más cara jamás rodada, o por la insólita inversión de Sylvester Stallone, que desembolsó 100.000 dólares de su propio bolsillo por culpa de un conejo.
Máximo éxito
Dirigida por Renny Harlin y con un guion escrito por Michael France y el propio Sylvester Stallone, Máximo Riesgo sigue la historia de Gabe Walker (interpretado por Stallone), un experto escalador y miembro de un equipo de rescate en las montañas Rocosas. Tras un trágico accidente en el que fallece la novia de su mejor amigo, Gabe abandona su trabajo, solo para verse arrastrado nuevamente a la acción cuando un grupo de criminales intenta recuperar 100 millones de dólares perdidos en las montañas. La película se desarrolla en un entorno de altitud, con paisajes espectaculares y escenas de acción vertiginosas que no han perdido su impacto a pesar del paso del tiempo.
Máximo Riesgo fue un éxito en taquilla, recaudando más de 255 millones de dólares a nivel mundial contra un presupuesto de aproximadamente 70 millones. Sin embargo, su recepción crítica fue mixta. Si bien algunos críticos elogiaron las escenas de acción y la dirección de Harlin, otros señalaron la falta de originalidad en su trama y los clichés propios del género. Tampoco se le puede pedir peras al olmo, ¿no? A pesar de ello, la película se ha mantenido como un referente del cine de acción de los 90, en parte gracias a dos historias detrás de cámaras que son tan fascinantes como las escenas que aparecen en pantalla.
¿El conejo más caro de Hollywood?
Una de las anécdotas más llamativas de la producción de Máximo Riesgo tiene que ver con una escena en la que se dispara contra un conejo. Durante un pase previo con público previo al estreno, la reacción de los espectadores ante la muerte del animal fue tan negativa que Sylvester Stallone decidió intervenir personalmente. En lugar de dejar la escena como estaba, Stallone invirtió 100.000 dólares de su propio dinero para volver a rodar la escena de manera que el conejo pudiera escapar ileso. Esta decisión no solo revela el compromiso del actor con la película, sino también su intuición para conectar con las emociones del público. La nueva escena, donde el conejo sobrevive, no solo suavizó el tono de la película, sino que también ayudó a evitar un posible revuelo negativo que podría haber afectado su rendimiento en taquilla.
Un salto de un millón de dólares
Pero si la historia del conejo es sorprendente, la hazaña que realmente ha quedado grabada en los anales de la historia del cine es la de la acrobacia aérea que ostenta el récord mundial por ser la más cara de todos los tiempos. Os recuerdo que es una película de 1993, y que nadie la haya superado todavía resulta meritorio. La escena en cuestión muestra a un ladrón trasladándose entre dos aviones en pleno vuelo, a más de 4.000 metros de altura, sin cables de seguridad ni efectos especiales digitales. Para llevar a cabo esta escena, el doble de acción Simon Crane fue contratado por la asombrosa cifra de un millón de dólares. La maniobra era tan peligrosa que ninguna compañía de seguros quiso cubrirla, lo que llevó a Stallone a reducir su salario para financiarla. La escena, que finalmente se filmó en los Estados Unidos porque era ilegal rodarla en Europa, es un testimonio del compromiso de Stallone y del equipo de producción con la autenticidad y el impacto visual, algo que ha quedado como una marca distintiva de Máximo Riesgo.
Precisamente este legado es lo que ha motivado a su creadores a desarrollar una secuela más de 30 años después del estreno original. La nueva película, que tentativamente se titulará Cliffhanger 2, estará dirigida por Jean-François Richet, conocido por películas como el pasable (e innecesario) remake de Asalto al Distrito 13.
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La noticia
La muerte de un conejo le supuso a Stallone una inversión de 100.000 dólares extra de su bolsillo en Máximo Riesgo, una de sus películas más espectaculares
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3DJuegos
por
Chema Mansilla
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