Un speedrunner usó una banda de rock en plena competición oficial para saltarse las demandas por copyright de Crazy Taxi

Las demandas por DMCA son muy complicadas de gestionar. Como muchos sistemas están automatizados, usar canciones licenciadas en juegos conlleva que creadores de contenido y streamers se vean limitados a la hora de jugarlos, pero también ciertos eventos en directo. Uno de ellos fue el evento de speedruns para la caridad Awesome Games Done Quick (AGDQ), para el que el speedrunner chuckles825 se llevó una banda de música para que interpretara sus canciones en directo y así saltarse el DMCA a través de Twitch. Un movimiento tan genial como caótico.

El clásico de SEGA, lanzado en 1999, fue una locura visual y adrenalínica que nos enamoró a todos hace más de 20 años con temas licenciados de Bad Religion y The Offspring. Una bestialidad que incluso hoy en día SEGA quiere rescatar para apelar a nuestros corazones más nostálgicos, pero que incluye un hándicap: al tratarse de un juego con sus años, la licencia de uso está limitada a ese proyecto, y jugarlo vía streaming supone que los “bots” de los japoneses te busquen y te cacen.

¿La solución de los AGDQ? Una banda de rock en directo

Por eso, chuckles825 decidió tirar de lógica y para su speedrun en AGDQ se llevó a la banda Limiter Cut, un grupo formado especialmente para la ocasión. En este caso, Limiter Cut sincronizó sus interpretaciones con lo que los espectadores veían, ajustándose al ritmo frenético del taxi en pantalla. Cada vez que chuckles825 completaba un nivel o cometía errores hilarantes, como conducir al mar con un taxi lleno de pasajeros, la banda se detenía abruptamente y reiniciaba la canción correspondiente como si fuera del propio juego.

La elección del repertorio también fue estratégica. Canciones como “Ten” de Bad Religion se tocaron casi en su totalidad gracias a niveles más largos, mientras que temas menos populares como “Way Down the Line” de The Offspring tuvieron menos protagonismo. La coordinación entre el juego y la música fue clave para mantener al público emocionado, destacando no solo la habilidad del speedrunner, sino también el talento de los músicos, especialmente del vocalista. Pero, lo mejor de todo, esquivó el DMCA de SEGA y la retransmisión fluyó con total normalidad.

AGDQ 2025 no solo ofreció este espectáculo único con Crazy Taxi, sino que demostró otra vez ser uno de los eventos de speedrun más vistos y exitosos del panorama reciente, logrando recaudar más de 2,5 millones de dólares para la Prevent Cancer Foundation. Además, en total ha sumado más de 54 millones recaudados en la historia del evento.

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Un speedrunner usó una banda de rock en plena competición oficial para saltarse las demandas por copyright de Crazy Taxi

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por
Alberto Lloria

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